Grave situación en el abastecimiento de agua, denunció el edil departamental, Dr. Gerardo Amarilla (lista 15 – Partido Nacional), reclamando una urgente solución en notas dirigidas al Presidente de OSE y al Director Nacional de Aguas.
En ese centro poblado, que comprende unas 50 viviendas y unas 400 personas, tienen una situación crítica respecto a la calidad de agua que están consumiendo y que categóricamente ha sido calificada como NO POTABLE, en un análisis realizado por el Laboratorio Municipal de Rivera.
Los exámenes que realizó la IMR el 11 de abril de 2007 y que analiza el agua de los dos pozos de que se abastece dicha población tienen una presencia de Coniformes y de mesófilos aerobios muy superiores a los mínimos permitidos para su consumo humano, lo que genera alarma y preocupación sanitaria por aquella población.
Como si fuera poco, a la gravedad referida a la calidad de las aguas, se suma la poca disponibilidad del recurso, por la escasez del caudal que apenas cubre unas pocas horas al día de abastecimiento.
De no actuarse en forma urgente, la situación se tornaría insostenible al reiniciarse las clases ya que por la presencia del Liceo Rural en aquella localidad, la cantidad de habitantes se duplica en el periodo lectivo.
Amarilla señaló que “atento a lo dispuesto en el art. 47 de la Constitución de la República, el Estado Uruguayo está vulnerando el derecho humano fundamental de estos ciudadanos al no garantizarles el acceso a la provisión de agua potable tal como está obligado” y aguarda urgentes medidas para resolver esta delicada situación.
En ese centro poblado, que comprende unas 50 viviendas y unas 400 personas, tienen una situación crítica respecto a la calidad de agua que están consumiendo y que categóricamente ha sido calificada como NO POTABLE, en un análisis realizado por el Laboratorio Municipal de Rivera.
Los exámenes que realizó la IMR el 11 de abril de 2007 y que analiza el agua de los dos pozos de que se abastece dicha población tienen una presencia de Coniformes y de mesófilos aerobios muy superiores a los mínimos permitidos para su consumo humano, lo que genera alarma y preocupación sanitaria por aquella población.
Como si fuera poco, a la gravedad referida a la calidad de las aguas, se suma la poca disponibilidad del recurso, por la escasez del caudal que apenas cubre unas pocas horas al día de abastecimiento.
De no actuarse en forma urgente, la situación se tornaría insostenible al reiniciarse las clases ya que por la presencia del Liceo Rural en aquella localidad, la cantidad de habitantes se duplica en el periodo lectivo.
Amarilla señaló que “atento a lo dispuesto en el art. 47 de la Constitución de la República, el Estado Uruguayo está vulnerando el derecho humano fundamental de estos ciudadanos al no garantizarles el acceso a la provisión de agua potable tal como está obligado” y aguarda urgentes medidas para resolver esta delicada situación.
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